Las autoridades del sector eléctrico nacional justificaron este miércoles las interrupciones en el suministro de energía registradas en distintas comunidades del país, explicando que se deben a trabajos preventivos y de mantenimiento urgente derivados de los efectos ocasionados por la tormenta Melissa, y no a fallas estructurales del sistema.
El presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDES), Celso Marranzini, afirmó que las brigadas técnicas se encuentran desplegadas en todo el territorio nacional, ejecutando labores de reparación y sustitución de líneas y equipos eléctricos afectados por las lluvias y ráfagas de viento del fenómeno atmosférico.
“Las interrupciones actuales no son producto de colapsos en el sistema, sino de mantenimientos necesarios para prevenir daños mayores en el futuro. Estamos trabajando de manera acelerada para restablecer la normalidad y garantizar un servicio más estable”, explicó Marranzini.
Por su parte, el superintendente de Electricidad, Andrés Astacio, reconoció que parte de la red eléctrica nacional presenta antigüedad considerable, con subestaciones y líneas que no habían recibido mantenimiento en más de una década, lo que ha requerido suspensiones temporales del servicio en algunos sectores para facilitar las intervenciones técnicas.
“Estamos corrigiendo rezagos históricos en infraestructura eléctrica. Algunas redes datan de hace más de 15 años, y la falta de mantenimiento previo nos obliga hoy a tomar medidas urgentes para proteger la estabilidad del sistema”, puntualizó Astacio.
No obstante, el empresario Félix García Ceballos advirtió que el sector enfrenta retos estructurales y de planificación a largo plazo, los cuales deben ser abordados de manera integral para evitar que las deficiencias técnicas y administrativas continúen afectando a la población y a los sectores productivos.
“Es necesario fortalecer la inversión en redes inteligentes, modernizar las subestaciones y establecer una planificación coherente que priorice la sostenibilidad del sistema eléctrico dominicano”, sostuvo el empresario.
Pese a los desafíos, Marranzini y Astacio destacaron los avances alcanzados en los últimos años, entre ellos la incorporación de 150 mil nuevos clientes, el reemplazo de 20 subestaciones y la superación de la escasez de transformadores, situación que había dejado por años a múltiples comunidades sin reposición de equipos.
Ambos funcionarios reafirmaron el compromiso del Gobierno y del sector energético con la modernización del sistema eléctrico, la reducción de pérdidas técnicas y la mejora sostenida del servicio para garantizar una red más eficiente, confiable y segura.